Monday, July 30, 2012

:::Los pasteles se hacen en moldes, las personas no:::
He pasado un mes bastante complicado haciendo la tesina de mi postítulo. Además estuve de cumpleaños y celebré mis 30 inviernos en esta tierra, acompañada por mi fiel hermana que me llevó por primera vez a jugar al casino y mi amiga Mariela que me llevó a carretear. Me gustó mucho mi celebración, pese a que mi celebración cumpleaños ideal es con mucho baile, un mago, un contorsionista, un equilibrista, un tragafuegos, un ramo gigante de globos con helio y, como eran 30, un stripper. Mi hermana dice que juntar todos esos elementos no se lleva a mi edad, pero creo que muy poco de lo que hago se lleva a mi edad.
Soy un bicho raro de mi generación, no porque sea especial, si no porque me muevo al borde de lo que mis contemporáneos podrían calificar como una "perdedora" y es que todos ellos, al menos los que yo conozco, están muy preocupados de ganar dinero, gastar dinero, conseguir exitos laborales, casarse, tener hijos y educar a esos hijos. Yo me resisto a entregarme a esas preocupaciones, creo que todo lo que tenga que vivir, sucederá, no quiero que mi vida sea eso que pasa mientras estoy ocupada haciendo otros planes, como dijo John Lenon. Soy una soñadora y eso definitivamente no es muy popular en mi generación, donde apegarse a lo real, concreto, inmediato y monetario es lo que se estila y desde ese lugar, soy distinta, no especial, solo distinta.
Cuando ya terminé mi tesina y pasó mi cumpleaños, intenté volver a mi vida normal, donde mezclo el trabajo con la escritura, por lo que me metí de lleno a elaborar el segundo capítulo de mi historia que va bastante bien y supongo que en unos meses podría estar lo suficientemente bien como para pasar a escribir el tercero. Cuando escribo algo no lo suelto hasta que considero que continuar mejorandolo podría arruinar su escencia y eso toma tiempo.
Después de que mi cuento se publicó un par de amigos me preguntaron si me habían pagado por él y se mostraron bastante decepcionados cuando les dije que no, que publicar en una revista no tenía que ver con el dinero, si no más bien con la confirmación de que lo que hago le guste a alguien más que a mi misma. No lograron entender la idea o quizás yo no supe explicárselas, porque continuaron mirándome con expresión decepcionada en el rostro. Debe ser porque la mayoría de los trabajadores normales tienen un breve período para alcanzar su máximo rendimiento y cosechar los frutos de este. Luego se jubilan y ya está.
La vida no siempre funciona de esa manera, ahí temenos al gran Morgan Freeman. ¿Alguien ha visto una de sus películas de juventud?, claro que no, porque no existen, él comenzó su carrera de actor a los 34 años y su primer reconocimiento lo obtuvo a los 52 años con "Conduciendo a Miss Daisy".
Pero mi ejemplo favorito es el de la Sra. Ursula K Le Guin, escritora de fantasía y ciencia ficción, creadora de la serie "Terramar", ganadora de varios premios, quien publicó su primer cuento a los 33 años en una revista dedicada a la ciencia ficción y actualmente a sus 82 años continúa trabajando y cosechando existos literarios.
 Los caminos a recorrer son tan infinitos como personas en el mundo existimos, si todos nacemos distintos, ¿Por qué deberíamos aspirar a hacer lo mismo al mismo tiempo?

Sunday, July 01, 2012

:::Sigue siendo el REY:::

Tenía 14 años, mi cuñado estaba haciendo la práctica en una minera, donde tenían una amplia biblioteca y desde allí me trajo "Eso" el primer libro que leí del maestro de maestros STEPHEN KING.
El Maestro nació en Portland, Estados Unidos, en Septiembre de 1947 y desde muy pequeño se dedicó a la literatura. Lo suyo siempre fue el terror y la fantasía, logrando vender algunos cuentos en revistas dedicadas al género, al parecer en EEUU hay revistas donde se pueden publicar relatos. Estudió literatura y se casó con su novia de la Universidad, Tabitha, con quien compartió los tiempos difíciles, trabajando para subsistir en condiciones de pobreza, eso si, nunca dejó de escribir. Después de leer muchos de sus libros y varios artículos biográficos, creo que nunca dejó de escribir porque no podía vivir sin hacerlo, contar historias estaba inserto en su ADN, era parte de su identidad, sin escribir, no habría sabido quien era y ya no le habría quedado nada más que mirar a su alrededor y aceptar la miseria en la que vivía, escribir era su vía escape, bueno, escribir, las drogas y el alcohol (para más detalles de su miseria leer "mientras escribo")
Por las noches, después de realizar sus dos jornadas de trabajo, Stephen se instalaba a escribir y beber, en esas condiciones escribió sobre una chica con poderes telequinéticos a la que fastidiaban en la escuela, pero el libro no le gustó y lo tiró a la basura. Al día siguiente se lo encontró sobre la mesa de la cocina, su esposa que lo había recogido y leído le pidió que no lo abandonara. Meses después el libro rescatado de la basura se convertiría en "Carrie" su primera novela publicada.
Desde ese entonces el Sr. King es un escritor MUY prolífico, en sus mejores tiempos escribía dos o tres novelas por año, además de varios cuentos, lo que es bastante meritorio considerando que una de sus novelas en promedio tiene 500 páginas. Él dice que para ser escritor hay que escribir 4 horas al día y leer otras 4 horas al día, que así lo hace él, claro que... el maestro hace cosas que solo el maestro puede hacer. La critica especializada le dio la espalda durante décadas, clasificando su literatura como basura para el consumo de las masas, lo que para mí es solo un indicador más de que los criticos literarios son unos señores muy estirados y aburridos que creen que las palabras son un privilegio de sectores exclusivos de la población.
"El resplandor" es un libro en que habla de sus adicciones y cómo estas lo controlan, después de ese libro, su familia y amigos lo obligaron a rehabilitarse, porque le hacía a todas las drogas y se ha mantenido limpio hasta el día de hoy.
Otro dato no menor es que Stephen King tiene una discapacidad visual que va aumentando con los años, por lo que eventualmente podría quedar ciego, por eso se ha preocupado mucho de fomentar los libros de audio, narrando él mismo algunos de sus libros en este formato. Esta discapacidad sumada a un accidente de tránsito sufrido hace varios años (lo atropellaron y dejaron medio muerto al borde de una carretera), lo llevaron a disminuir la cantidad de escritos anuales.
Mis libros favoritos de Stephen king son: "Eso", "Apocalipsis", "Los ojos del dragón", "Las cuatro estaciones" y "la milla verde". Sé que son mis favoritos porque cuando pienso en todos los libros que he leído de él son los primeros que asoman a mi conciencia.
No se pierdan la literatura del maestro absoluto de lo fantástico y horroroso. La vida es muy corta para pasar por ella sin haber tomado nunca un libro de STEPHEN KING