Sunday, December 07, 2008

::::SOY::::


Me reconozco pequeña en el mundo y vivo en concordancia con esta creencia. Hay tantisimas personas que son mucho más grandes que yo, más interesantes y más inteligentes, que prefiero no gastar mis esfuerzos en ponerme a la par con ninguno de ellos. Eso si, creo que la gente más valiosa es la que simplemente lo es, sin necesidad alguna de mostrar cuanto sabe o cuanto posee, quienes son verdaderamente importantes nunca sienten que lo son.
Hace años me comparé con ese tipo de pasto que crece en cualquier parte, de ese que puede crecer en medio del pavimento, porque no necesito ser una hermosa flor para sentirme viva, prefiero crecer en medio de la adversidad, que ser admirada por mi delicadeza y mi perfume.
No tengo aspiraciones de poder y muchas veces parece que careciera de ambición, más no lo hago, simplemente mi ambición es de una naturaleza distinta, lo material carece de importancia frente a la eterna dicha de un grato momento. Lo grandioso en mi vida es lo más pequeño.
Mi existencia cobra sentido en el servir, no me adjudico el triunfo de una terapia bien lograda, no me regocijo en mis conocimientos técnicos, no importa cuan bien los pueda manejar, si no soy capaz de llevar esperanza a la vida de quienes se sientan frente a mí, nada de lo que haga puede importar. En cambio, si consigo que alguien sonría, si por alguna maniobra del destino, de la cual no me hago responsable, el estar a mi lado hace feliz a algún otro ser, entonces sabré que lo hice bien.
Mi madre me dijo de muy pequeña que podía enamorarme de cualquier persona siempre que fuera alguien que me quisiera mucho y me aceptara como soy, por lo tanto, nunca he aspirado a que me acompañe el más inteligente, el más sabio, el más adinerado o el con mejor futuro. Casi nunca escucho los concejos de mi madre, pero este lo recibí con el corazón abierto y aunque he visto que en el mundo las otras cosas importan más, para mí un corazón gentil en un hombre cariñoso es un bien que perdura por la eternidad.
Y si nadie logra entender mi gusto por la pequeñez, yo "moriré con las botas puestas", como dice mi pololo, porque elegí vivir mi vida de este modo, elegí respetar todas las naturalezas, aunque no las comparta; elegí amar con todas las fuerzas de mi corazón, no importa si me equivoco; Elegí admirar en vez de ser admirada; Elegí el camino menos concurrido, quizas eso haga toda la diferencia.

3 comments:

Silvia said...

Hay quienes te admiran precisamente por como eres querida Romi,y en eso precisamente esta tu encanto, eres sin esperar que los demas se enteren, quienes tenemos la dicha de conocerte admiramos tus pensamientos, tu forma de ver la vida, tu talento para sortear lo que te presenta el camino y salir siempre triunfadora!

Orgullosa de ser tu amiga!!


te quiere

Silvia!

rominita said...

Mi querida Silvia:
Como me conoces pese a que nos separan varios paises!!!!
Yo te admiro por esa capacidad de ver lo que otros no pueden, le haces justicia al principito, porque ves la verdad que es invicible a los ojos.
Te quiero mucho amiga

Silvia said...

Querida Romi: Gracias por tu cariño, espero siempre corresponderlo, que tengas una Feliz Navidad y un prospero Año Nuevo, que se consoliden tus proyectos, tus ilusiones, tus sueños, mis mejores deseos para ti,

un abrazo grande

TQM

Silvia