:::FLOPY Y YO:::

Este va para ti amiga, rescatado de las sombras del pasado, iluminando con su luz el presente y el futuro.

Flopy es una de las formas en que llamo a mi mejor amiga en el mundo. Originalmente nos llamabamos "Patner" una a la otra -así como con mi hermana nos llamamos "Loca"- hasta que un día de tantos bajamos de su casa caminando al centro, tomadas del brazo, con otro amigo de aquella época, Pepe, y el dijo que pareciamos Flipy y Flopy, nos reímos mucho y ella me preguntó cual quería ser yo, Flipy contesté, y desde ese día somos Flipy y Flopy y cada vez que ocurre algún acontecimiento decimos que es un capítulo más en nuestro libro, por ejemplo "Flipy y Flopy van a una fiesta" o "Flipy y Flopy van a universidad" y otros muy tristes como "Flipy y Flopy van al funeral del abuelo de Flipy".
Nuestra historia juntas es una mera casualidad, de esas cosas misteriosas que hace Dios para juntarte con las personas indicadas. Eramos compañeras en confirmación, estuvimos juntas sentadas en el mismo salón con otras 40 personas por dos años sin cruzar más que tres palabras, luego nos pilló el encuentro continental de jóvenes en Chile y ambas comenzamos a prepararnos para el acontecimiento, en esa época yo había perdido todo contacto con mi hermana, estaba muy sola, porque mi hermana desde que somos grandes ha sido mi mejor amiga; Flopy ocupó su lugar en mi corazón, no porque no tuviera otras amigas, si no porque era un lugar echo a su medida.
Eramos parte de un grupo más grande de amigos, todos pertenecíamos a la misma parroquia y nos hacíamos llamar "la familia", porque cada uno de nosotros tenía un rol...pero esa es parte de otra historia. Dentro de esta familia Flopy y yo nos hicimos cada vez más cercanas, ella era mi roca, siempre dueña de sí misma, controlada, racional, sin pelos en la lengua y muy creativa. A su lado yo me sentía fuerte y si flaqueaba ella estaba ahí para levantarme con su sarcasmo y su racionalidad, ella era "la maldad suprema", porque pese a todo se mantenía fiel a si misma.
A veces caminábamos tomadas de la mano por la calle, arreglando el mundo, creando mundos nuevos. Como olvidar las tardes mirando la puesta de sol en nuestra destartalada escalera de cemento, nuestro lugar secreto, ya que aún estando en medio de la calle, nadie se detenía a vernos. Fumabamos algunos cigarros, nos reíamos de las tonteras que hacían nuestros amigos, a veces le contaba algún cuento de creación espontánea -"Dime tres palabras y te hago un cuento"- que ella celebraba como si fuera de García Marquez, cantábamos nuestra canción de Fito - "Si un corazón triste pudo ver la luz..."- y nos ibamos, a la parroquia, a una fiesta, a jugar pool...dependiendo de la ocación.
Como olvidar el verano en que te fuiste a Alemania y nos escribíamos largas cartas contándonos todo, incluso me llamaste el 14 de febrero para saludarme, porque allá también era el día de la amistad.
Mi amiga es tan cercana a mi que nunca voy a poder terminar de explicarme lo profundo del cariño que le tengo, solo lo puedo comparar con el que siento por mi hermana, porque ambas anidan juntas en mi corazón y han cambiado con su ejemplo, su paciecia, su caracter y sus palabras algo en mi alma, han dejado profundas huellas que crean un lazo entre nosotras indestructible por la lejanía y por el tiempo.
Ahora mi amiga va a ser mamá, ¡Cuánto hemos crecido!, jamás imaginé el día en la conocí que iba a estar a su lado tanto tiempo como para verla convertida en mamá de otro ser humano, ella tiene sus dudas, pero yo estoy segura que va a ser una gran mamá y Antonio (ese el nombre de su hijo) va a ser un chiquillo muy feliz y agradecido de tenerla a ella.
Flopy maravillosa estrella que iluminó mi camino en tiempos de infinita oscuridad. Te quiero mucho.

Rominita chii